Hoy realizamos la entrega de árboles nativos a los sectores afectados por los incendios forestales ocurridos en febrero. Quillayes, Araucarias y Cipreses llegaron a Ranchillo Bajo y San Miguel de Itata gracias al programa de arborización de CONAF y una solicitud especial del municipio a través de su Oficina Forestal.
Estas especies nativas son vitales para la biodiversidad y la protección de nuestros ecosistemas. Su presencia no solo embellecerá el paisaje, sino que también contribuirá a la recuperación de las zonas afectadas.
La entrega se realizó a familias afectadas y además, las Juntas de vecinos de Ranchillo Bajo y San Miguel de Itata se unieron a esta noble causa y realizarán una entrega de árboles a sus socios.
¡Felicidades a todos los involucrados en esta gran labor! Sigamos trabajando juntos para proteger y restaurar nuestros bosques, ¡por un futuro más verde y sostenible!